Abre sus puertas la Feria Internacional del Libro de la Habana

Este 9 de febrero inicia sus actividades la XXVI edición de la Feria Internacional del Libro de La Habana, un encuentro social y cultural que por su repercusión y asistencia de público está considerado como el más importante de la agenda cultural cubana. Si bien esta cita se inicia en la capital de la mayor de las Antillas en realidad de manera itinerante irá recorriendo la geografía de la Isla hasta culminar, en el mes de abril, en la Santiago de Cuba.

En su capítulo habanero este encuentro de los amantes de los libros y la literatura se extenderá desde el 9 hasta el 19 de este mismo mes. Diez largos e intensos días repletos de presentaciones de títulos, ventas y actividades culturales co-laterales de muy diverso tipo, tanto en su sede principal, la impresionante y colonial Fortaleza de La Cabaña, situada en la entrada de la bahía, como en sus 11 sub-sedes repartidas a lo ancho de la ciudad.

En esta ocasión el país invitado será Canadá, que estará ampliamente representada mediante la presencia de más de 30 escritores y escritoras, y 18 casas editoriales. Una muestra de la interesante diversidad cultural y lingüística de ese país, que a conocidos escritores en lengua inglesa como pueden ser Margaret Atwood o Graeme Gibson les une un grupo de narradoras francófonas de la región de Quebec, como son Jocelyne Saucier, Louise Desjardins, Sophie Bienvenu y Regan Bougé. Además la delegación canadiense contará con la actuación del grupo musical The Jerry Cans cuyas letras son en lengua inuktitut (de los inuit o esquimales) y una muestra de su cine más contemporáneo.

En esta ocasión, de manera muy especial, la cita cultural rendirá homenaje al recientemente fallecido Comandante Fidel Castro, sobre el que se presentaran 24 libros, y al destacado revolucionario y estudioso del legado de José Martí Armando Hart Dávalos.

La presencia de representantes de 46 países, 60 editoriales extranjeras y la práctica totalidad de las nacionales, 4 millones de ejemplares de los cuales algo más de 3 millones corresponden a 700 nuevos títulos, anuncia la intensidad literaria y cultural que desde este 9 de febrero y por casi tres meses invadirá progresivamente la geografía y la sociedad cubana.

El contexto de esta fiesta multitudinaria de las letras será también marco oportuno para medir la salud y los problemas que plantean la marcada disminución de los hábitos de lectura a nivel internacional, y que también son perceptibles en el caso cubano en comparación, por ejemplo, con la década de 1980. A pesar de que los libros mantienen precios realmente asequibles, y de hecho son altamente subencionados por el presupuesto estatal como parte de los derechos sociales, de que Cuba es un país libre de analfabetismo desde 1962 y mantiene altos índices de educación e instrucción, datos publicados recientemente indican que casi el 45% de la población joven declara que no lee libros, tema que abordaba recientemente una crónica, referida específicamente al género de la poesía, el pasado 5 de febrero del diario Juventud Rebelde con el título Trágico anuncio. ¿Muere la poesía?

El debate cultural sin duda está servido y la cita literaria cubana servirá también para el intercambio y la discusión en torno a un fenómeno internacional, aplicando en este caso las variables nacionales: Dificultades y limitaciones financieras y materiales, carencias de variedad en títulos y novedades, muy escasa oferta del libro digital, nuevos hábitos y usos sociales, retrasos y limitaciones en el uso y masificación de medios de comunicación digital…

De cualquier manera el libro, la literatura, los autores, los lectores, es decir todos los protagonistas de ese placer que es crear y recrear en nuestra mente historias contarán durante estas semanas con un medio ambiente muy apropiado en Cuba.

      

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